Another (shot) Capitulo 8

            

          Chanyeol estaba feliz. Tenían la confianza suficiente como para llegar a ese punto. Aunque luego de esa noche no habían vuelto  a pasarse tanto, cada vez que podía se escurría hacia su habitación, o el pequeño se las ingeniaba para pasar delante del cuarto de Kibum sin que lo viesen. Navidad estaba cerca, y tenían unas mini vacaciones antes del 27 de diciembre, que era el desfile final de XHolic. El edificio estaba casi vacio, eran pocos los que no aprovechaban para ir a con su familia ya que el 31 trabajarían.

                Para el 24 a la noche Chanyeol había planeado una cita, y al otro día irían a lo de su hermana.

                -Acompañaré a Kyungsoo hasta la estación, ¿vale?-le dijo Jongin poniéndose un abrigo- vengo y vemos que hacemos por la tarde.  

                Camino a la habitación de D.o se cruzó con Luhan que lo saludó apenas con un movimiento de cabeza.

                -¿Te quedas aquí?-le preguntó Jongin mientras esperaban el ascensor.

                -Si -lo miró de reojo un segundo.

                -Ah. Mmh, oye, hay algo que quería hablar contigo, si no te vas, antes de irme esta noche, ¿podemos quedar? Serán solo unos minutos – quería sacarle algo de información. Sehun ya lo tenía cansado de andar haciendo sus mil y un deducciones, de las cuales él tenía que escuchar y comentar todas.

                El pelirrojo frunció un poco el seño, pero entró al ascensor.

                -Vale. Estaré en la piscina.

                Jongin dio un paso hacia adelante para entrar pero Luhan le cerró la puerta.

                -Lo siento, no hay más espacio-se encogió de hombros. Iba solo.

                ¿Cómo le podía gustar ese tío a Sehun?

                Fue por las escaleras, su pequeño lo estaba esperando con un pepero en la boca sentado sobre su maleta.

                -Tardaste mucho –le dijo serenamente.

                -Vine por las escaleras, percance en el ascensor-lo tomó por la cadera y se comió su pepero de a poquito hasta dar con sus labios y besarlo. El mas bajo sonrió- ¿Por qué siempre comes estas cosas?-saboreó bien y puso cara de asco- no son peperos.

                -Son suplementos dietarios, pero yo sustituyo la comida con estos-se encogió de hombros. El moreno lo miró mal.

                -Debes comer. Mm, cuando vuelva arreglaremos eso-el contrario levantó las cejas y luego rió. Jongin llevó su maleta mientras el se aferraba de su brazo caminando hacia la estación.

                Sería una tortura, tres días sin su Kyungsoo, fiuuf.

               

                -Xiumin, ¿tú te irás?-le preguntó Baekhyun asomándose por la puerta de su habitación.

                -Eh…sí, sí que me iré. De hecho estaba terminando de armar mi mochila-le sonrió apenas. Últimamente no quería saber nada de Baekhyun, nada. Durante esos meses las cosas habían cambiado. A él le estaba yendo mejor en las campañas, su cuerpo estaba más tonificado, y no lo trataban como un novato. Además, Heechul…ya no lo golpeaba tanto, aun lo obligaba a hacer cosas que no quería pero…tampoco le desagradaban tanto. Y eso le hacía odiarse en parte, porque cuando se lo había imaginado con las manos encima de otro, la sangre le hirvió- ¿y tu?

                -Oh yo pues saldré con…-se dio cuenta que no podía contarle, y cambió rápido- con Jongin. No nos iremos a nuestras casas porque vivimos demasiado lejos-hizo una mueca fingiendo estar apenado- pero la pasaremos bien, seguro.

                -Mmh, debo cambiarme, ¿vale?-insinuando que se valla.

                -¿Oye podemos quedar para tomar unas cervezas luego de navidad?

                -Ehh…-por qué insistía en llevarse con el, incluso le respondía mal- vale, veré si tengo tiempo.

                Baekhyun corrió a abrazarlo. Y sus ojos se llenaron de lágrimas. El si lo quería, en verdad lo quería. Y sin embargo no podía corresponderle, porque no lo tenía permitido.

                -Vete Baekhyun por favor, debo irme ya. Nos veremos luego de navidad –le sonrió y se volteó rápido esperando que se fuese. El menor salió algo desconcertado pero feliz de que hubiese aceptado.  Xiumin se encerró en su cuarto. Aun debía ordenar sus cosas y no quería que lo viese nadie al salir.

                Baekhyun se duchó y se cambió, aun tenía tiempo de ir a comprar un regalo. Fue a una tienda, no había tenido más ratos libres que para hacerle una tonta tarjeta. Sabía bien que regalarle, Chanyeol había estado mirando unas fundas para cámaras con modelos de sapitos, así que no se demoró más que en llegar y que se lo empaquetaran. Le sumó un par de guantes sin deditos, asi podía sacar fotos cómodo y calentito.

                Faltaba casi una hora para las nueve y media, que era cuando habían quedado. Estaba nervioso, se quería dormir un rato pero no podría hacerlo. Además se desacomodaría…Jongin no había regresado, asi que se fue solo a jugar un rato a la play. Sehun se había ido con Kyuhyun, otra persona menos con la que pasar el rato. Pero que sueño que tenia…

                Chanyeol acomodó su casa lo mejor que pudo, lo llevaría a cenar a un lugar bonito y luego irían a dormir allí. Eso era una de las cosas que más quería hacer con él, poder amanecer a su lado y no tener que salir corriendo como una cenicienta. Le había comprado un par de medias rayadas, sabía que las amaba.  A las nueve salió hacia el edificio, se suponía que el ya estaba de vacaciones desde la mañana asi que se había vuelto a su casa. No podía ir a su habitación a buscarlo asi que se quedó en su coche hasta que saliese. A las diez aun no había bajado, tal vez se siguiese acomodando, o alguien le hubiese entretenido. Jugó con su móvil entre los dedos, en diez minutos le enviaría un mensaje.

                A las once estaba sentado en el sofá de la recepción. Se había paseado por los cuartos, pero no lo había encontrado.

                -Yuri, ¿has visto salir a Baekhyun y a Jongin?-le preguntó acercándose.

                -No, lo siento, si no salieron ya para la cena con los demás, no se donde podrían estar, si los veo les aviso…

                -Oh, es que quedé que los alcanzaría hasta su casa en mi coche pero, no los encuentro-hizo una mueca.

                -Yo ya me voy, te dejo la llave si quieres, solo tienes que cerrar adelante…llamame cuando sepas de ellos, ¿vale? O me quedaré preocupada-Hizo una mueca y le dio un besito en la frente- tal vez deberías ir a casa, tal vez ya se fueron…ten una linda navidad Chanyeol.

                Se fue. Al rato recibió un mensaje de Baekhyun:

                                                               “Estoy con Jongin, me fui antes, lo siento me dio vergúenza”

                ¿Vergüenza? ¿Enserio le estaba enviando ese mensaje? Pero al segundo le entró otro.

                                                              “No quiero volver a verte, y menos esta noche, lo siento.”

                Se sintió como un idiota. En navidad, esperándolo, ¿y le mandaba eso? Frunció el seño, eso no era posible, sabía que el también esperaba esa noche. A no ser, que…en verdad no lo quisiera.  Estaba yendo hacia los dormitorios cuando se paró en seco en medio del pasillo poco iluminado. ¿Y si de verdad no lo quería? Lo llamó pero no le cogió ninguna de las once veces que reintentó. Por si acaso no lo había escuchado.

                Xiumin sintió como alguien golpeaba suave su puerta y se quedó callado, esperando que supusiesen que no estaba dentro. Pero la persona no desistía, y el sabia quien era. Que lo dejara en paz, una noche al menos…Unas llaves, clac.

                -¿Por qué no me abres?-preguntó Heechul entrando mirándolo con curiosidad. Xiumin había salido corriendo hacia el baño y se hizo el que venía de allí.

                -Lo siento, estaba en el baño-se aferró de su camiseta.

                -No me mientas, se cuando lo haces-le dijo levantando su mentón. Xiumin cerró los ojos pensando que le pegaría, pero el mayor se limitó a besarlo con delicadeza- hoy es navidad. Te hare un regalo.

                Se asustó. ¿Qué regalo? El tenia la mente trastornada…dejarlo ir a su casa no creyó que fuese una opción.

                -Hoy-continuó- te mostrare algo-le sonrió- hoy no estaremos solos mi Bollito. Necesito tu ayuda. Sé que lo pasaras bien-le dejó otro beso y un papel en el bolsillo- las indicaciones.

                Se fue. Directo a la sala de descanso con un pequeño pañuelo en la mano. Pero no necesitó hacer demasiado. Su presa estaba dormida frente a la tv, con la cabeza inclinada hacia el hombro y el móvil en la mano. Un simple roce del pañuelo contra su boca, que lo hacían despertar abriendo grande los ojos, pero el querer respirar, le llenó más rápido los pulmones de burundanga…

                Tic tac, comenzaba el juego.

                Splash.

                Un chapuzón. Jongin se inclinó al lado de la piscina.

                -Creo que es un poco tarde para andar nadando, ¿no te parece mojarrita?-dijo sonriendo viendo como Luhan nadaba por debajo, sin saberlo yendo hacia su dirección. Cuando salió se aferro del borde, y con los ojos aun cerrados se quitó el agua del rostro llevándose hacia atrás el cabello. Al abrir los ojos lo vio demasiado cerca de el- hola.

                Luhan se asustó y se fue hacia atrás rápido salpicándole agua, pero Jongin perdió el equilibrio y cayó dentro.

                -Tsk, idiota-dijo de mala gana al darse cuenta. Miró donde había caído el menor…-Jongin…-se hundió para buscarlo, pero no estaba. Sintió como alguien jalaba de su pie y salió rápido- ¡idiota!

                El moreno reía a carcajadas.      

                -Lo siento, lo siento –se disculpaba entre risas mientra el otro salía del agua ignorándolo.

                -Pudrete Jongin.

                Jongin.

                Lo miró, ese bañador que le llegaba hasta la rodilla, ajustado, negro con una línea violeta…su culito. Iigh. Se sumergió hasta la boca haciendo burbujitas mientras el mayor se ponía una toalla sobre el cuerpo.

                Tic tac…tic tac…

                Se paró, y salió. La ropa mojada le pasaba un montón. Luhan lo miró de reojo, la musculosa empapada dejaba marcados todos sus musculos.

                -Oye…-fue hasta los guardarropas a por una toalla tapándose sus partesitas con las manos porque sentía que se le marcaban demasiado con ese jean que tenía. Así que se los quitó y se envolvió con un toallón- Luhan.

                -¿Qué quieres? Si es ropa, no, no te presto- el corazón le latía rápido e intentaba no mirarlo.

                -¿Qué te sucede con Sehun?

                Odió su pregunta.

                -No sé, dime tu –molesto se secó los brazos. Pasaba de ducharse.

                -¿Yo?-rio bajo- tu eres el que se acuesta con el y luego lo ignora, o lo abofetea en público.

                -Si me vienes a hablar de Sehun, vete- arrojó las gafas de agua dentro de la mochila volteando hacia el.

                Jongin se lo quedo mirando, se había acercado un poco.

                -Y si no era para hablar de Sehun, ¿Por qué pensaste que me acercaría a hablar contigo? Ni siquiera me caes bien.

                El corazón se le estaba retorciendo a Luhan en ese momento.

                -Jongin…

                “Jongin”. De nuevo diciendo su nombre. Se le acercó aún más.

                -¿Tal vez pensabas que yo quería hablar a solas contigo para decirte que me gustas?-levantó las cejas mirándolo.

                Idiota. Lo maldijo por dentro. Y por fuera también.

                -Creido, eres un puto creido, eso eres, pero ag quien te crees-estaba enfurecido. Pero el moreno lo tomó por la muñeca jalándolo hacia el. Se quedó congelado.

                -Se que me miras diferente Luhan, y que cada vez que estoy cerca de Sehun tu te pones así, y lo tratas mal. ¿No será que te gusto yo también?-le hablaba mirándolo fijo a los labios.

                -Que dices…-no podía, quería patearlo. Intentó abofetearlo, pero el contrario tomó su otra mano y comenzó a besarlo con fuerza. Lo empujó hacia atrás- ¡Que haces!

                Jongin se lo quedó mirando y se pasó la lengua leve por los labios.

                -¿Muere aquí?-preguntó el pelirrojo.

                -Muere aquí –le respondió. Un segundo después Luhan arremetía contra sus labios pegándolo a los casilleros, acariciando todo su torso con ganas.

               

                Baekhyun se despertó de a poco. Estaba mareado, y no podía concentrarse bien. ¿Qué había pasado? Se había quedado dormido en el sofá…¿alguien lo había llevado a su cuarto? Chanyeol! Iba a verse con Chanyeol! Se desesperó al pensar que llegaría tarde. Intentó moverse, pero no pudo. No estaba acostado, estaba centado. Abrió los ojos, apenas veía. Estaba atado a una silla.

                Joder, ¿Dónde estaba? Oscuro, y solo, el pánico se apodero de el. Intentó hablar, pero no le salieron palabras. Se asustó al sentir algo rozándole la nuca y se hizo un poco hacia adelante. No podía hablar porque llevaba una mordaza en la boca.

                Alguien se puso de cuclillas delante de él.

                -Hola Baekkie-le sonrió.

                Heechul. Era un asesor, que lo ayudara, que lo sacara de allí. Alguien debió de haberle jugado una broma pesada. Le pidió socorro con los ojos.

                -¿Qué sucede?-lo miró con un leve puchero haciendo la cabecita de lado. Le quitó la venda de la boca.

                -Ayúdeme hyung, alguien me…-pero las palabras se hicieron inaudibles cuando iba cayendo en la cuenta. Que idiota, no había más nadie allí.

                -Estuve viéndote últimamente-se paró delante de el lamiéndose los labios- y creo que has mejorado mucho. Creo que filtrear con ese camarógrafo te soltó bastante, ¿verdad? Te desinhibiste bastante. Y bueno como premio, pensé en hacerte un regalo por navidad.

                De que estaba hablando.

                -Mm,¿ puede soltarme? No se de que me …-pero Heechul tomó su mentón y se sentó sobre el inclinándole la cabeza hacia atrás.

                -No te hagas, no me mientas, y no me contradigas, nunca- dejó su carita con brusquedad y se paró.

                -Pero yo, no se de que-aun seguía intentando entender. ¿Todo eso era por andar con Yeol? Tampoco era para tanto. Pero recibió un golpe en la ceja con el revez de su mano. Iba enserio.

                -No te hagas, ya te dije- lo miró como el pequeño se horrorizaba- perdona bebe perdóname-se le acerco y le repartió besitos por toda la cara a los que el rubio intentó esquivar.

                -Déjeme…que hace hyung- quizo zafar las manos, pero estaban atadas con sogas demasiado ajustadas.

                -Oh, no, lo siento. Aun debemos divertirnos. Bueno, yo me divertiré. Tu, depende como te portes.

                Dios, estaba loco. Miró alrededor odiándose más por hacerlo. Había un escritorio viejo a un lado, con un par de cuerinas largas, mas sogas, unas bolas plateadas, un par de anillos y objetos que no reconoció, una pinza, un liquido…desvió la mirada, una cama con unas sabanas desordenadas. Un mueble a su izquierda, y una puerta detrás de Heechul. Lo miró.

                Heechul se le acercó pasando la mano por su pecho, caminando a su alrededor. Estaba paralizado del miedo, y al mismo tiempo se sentía débil, su cuerpo no respondía bien. Tal vez lo había drogado. Le desprendió los botones de la camisa.

                -No…que hace…-susurró.

                -Shsh, no te asustes-le dijo mientras cogía una pinza parecída a unas garritas del escritorio- esto uso para cuando la ropa que llevas es muy complicada de quitar.

                Acercó el artefacto y lo prendió de la camiseta que llevaba debajo de la camisa. Rasgó la tela, pero con el también lo raspó a el. Se mordió los labios.

                -Y ese jean, no no no –negó con la cabeza- demasiado ajustado bebe –deslizó el artefacto que fue rasgando su jean y sus piernas, ardiéndole con cada arañazo- Mmm, te vas viendo mas apetecible así.

                Tenía que ser fuerte. Tal vez si lo despistaba un rato Chanyeol se diera cuenta de que no estaba y lo buscaba.

                Pero Heechul ignoraba todos los intentos de oraciones que Baekhyun intentaba formular.

                -¡Dejeme ir! –gritó cuando las fuerza le estaban volviendo, desesperandoce, ya que se había quedado con la ropa hecha pedazos y Heechul le vertía un liquido pegajoso sobre el pecho- Dejeme…-le estaba besando el cuello parado desde detrás suyo. Las lagrimas le caían solas como un rio por las mejillas. Acariciaba su pecho con lujuria, hasta dar con su entrepierna- deténgase…

                -Pero si ni siquiera comienzo-apenas rozó su miembro sobre lo que quedaba sano de su jean cuando se separó y lo desató de la silla, pero sin separar sus muñecas sujetadas con unos presintos. Lo tiró al suelo, las rodillas le crujieron por el golpe fuerte- Que sucede Baekhyun, ¿no posas sexy como en las fotos? –lo pateó en el estómago haciéndolo caer de lado, chocando contra el mueble, donde se quedó apoyado. Ahogó un gemido de dolor.

                Heechul se deshizo de la ropa superior de él y comenzó a tocarlo pegándolo contra el mueble. Baekhyun intentaba zafarse con todas sus fuerzas, escasas, pero lo hacía. Chanyeol…era en lo único que podía pensar.

                Clac. Algo se había caído a sus espaldas.

                -Oh…Xiumin –susurró Heechul jalando el cabello de Baekhyun antes de tirarlo de nuevo para que quedase de rodillas y la cara en el suelo. Xiumin, si el estaba allí, que lo ayudara, o que se fuese corriendo a pedir ayuda. Pero sus esperanzas se desmoronaron cuando el mayor siguió hablando- ¿tan rápido te estas poniendo, bonito? Tienes que filmar todo bien, con detalle, ¿oiste?

                Se le acercó al otro aprendiz y lo besó tocándolo mientras sostenía su cámara por un segundo antes de volvérsela a dar.

                -Mira bien ahora, jugaremos-volvió hacia Baekhyun y pasando una mano hacia su vientre, la metió por dentro de su bóxer y tomó su miembro sin cuidado poniéndole algo de metal frio alrededor.

                -Hhmm- que le estaba haciendo. Al instante sintió como esa cosa vibraba de a poco y le hacía acelerar la respiración. Lo tomó de nuevo por el cabello levantando su carita y lo arrastró hasta quedar cerca de la cama donde se sentó. Chilló de dolor.

                -Ven…-sonrió de lado al tiempo que apoyaba su miembro contra la cara del menor. Cuando lo notó se desesperó y gritó intentando hacerse de lado. Pero la presión de su entrepierna más la fuerza en su cabello se lo impidieron, volviéndolo a la posición que el otro quería. A los segundos, con brusquedad, sentía las arcadas producidas por su miembro dentro de su boca. Estaba completamente mojado, entre el líquido que le había vertido, el sudor frio y las lagrimas. Por favor, que se acabara esa tortura.

                Si era una pesadilla, que lo despertaran.

                Vio como Xiumin se acercaba tímidamente sonrojado a filmarlo.

                Chanyeol, ¿Dónde estás?

                Ayúdame, por favor.

               

               

               

                Chanyeol comenzó a pasearse por el edificio. Había encontrado en la habitación de él una tarjeta para él con un paquete de regalo. Él no se había ido, le había sucedido algo. Rastreó el número de Jongin, estaba encendido, y dentro del edificio. Tal vez el supiera donde estaba Baekhyun.

                -Luhan…-susurró Jongin besándolo con ambas manos en el trasero del mayor, ese que tantas veces había visto y quería apretar. Lo tenía sentado sobre el, mientras se apoyaba en los casilleros y lo abrazaba con las piernas por la cintura, moviéndose encima, rozando sus partes.

                Luhan mordió su cuello mientras lo masturbaba con ganas. Tenía las mejillas encendidas.

                -Jongin…-rozando con sus labios los hombros descubiertos ya sin musculosa del menor…

                Su nombre, como decía su nombre lo hacia perder el control. Lo movió hacia atrás jalando su bañador hacia abajo dejándolo completamente desnudo antes de girarlo y ponerlo sobre el.

                -Te lo haré bien rico, y no dejaras de gemir mi nombre…-que con el agua bastase para lubricarlo, lo embistió de una vez, pero lento, tomándolo de la cadera para hacerlo bajar sobre su miembro con cuidado.

                -Ahha aaahh-los gemidos entrecortados se alargaban, cada vez mas fuerte. Con una mano tomaba la del moreno, fuerte sobre su pecho, mientras el otro le besaba el cuello y lo tocaba a la vez. Estaba entregado por completo a el en ese momento. Jongin le hacia mantener las piernas abiertas, moviéndose con fuerza dentro suyo. Lo sentía latir  y crecer en su interior, eso sumado a sus manos en su miembro…dejó caer la cabeza hacia atrás- Jo..jongin.. mmmh…

                Chanyeol lo escuchó clarito, eran gemidos.

                Se imaginó a su Baekhyun. Y se acordó de los comentarios de Sehun. Se pasó la mano por el rostro acalorado de tanto correr por el edificio. Abrió la puerta de golpe de uno de los últimos pisos. Un salón enorme. Miró su móvil, estaba cerca…

               

Another(shot) Capitulo 7. Casi, pero no.

               

               -Sehun, despierta –Jongin lo movió despacito para no asustarle.

                El menor bostezó.

                -¿Qué quieres?

                -Luhan. Kyungsoo me habló, creo que tiene problemas.

                -¿Luhan?-se levantó de golpe- habla.

                -Mm, el jefe, Kris, lo estuvo citando un par de veces, igual que Siwon, se supone que es su asesor, pero dice que lo tiene cansado de tanto buscarlo.

                -¿Buscarlo en qué sentido?-se puso más serio que de costumbre. Ya conocía a Siwon y Heechul.

                -Ya sabes…o eso es lo que entendí. Que Luhan se está sintiendo incómodo.

                -Malditos putos-se levantó y se cambió rápido- tu cuidad a tu amigo, te lo repito.

                -Y a Kyungsoo.

                -No tanto, a él no le tocaran un pelo, su asesor es Eunhyuk, antes Siwon andaba con el y le tiene respeto. Pero no a Donghae, a el lo detesta. Piensa que le quitó el novio.

                -¿Y tu como sabes todo eso?-preguntó curioso asimilando lo que le decía.

                -Vivo aquí desde pequeño, además Kyuhyun, pues él me enseño a mirar y oír entre líneas…-frunció el seño- creo que debo irme. Hay algo que…luego hablamos.

                Se dirigió a la habitación de de Heechul. Quedaba al final del último piso de los dormitorios, al fondo, donde el pasillo se angostaba. Se quedó parado al lado de la puerta durante unos segundos oyendo.

                “- ¿A, si? ¿Asi que ya te gusta tu hyung? –susurraba a quien creó era Heechul.

                -S..si, me gustas –un leve gemido. “

                No era Luhan. Respiró aliviado con una mano en el pecho y se alejó, no quería oír mas nada. Si Xiumin andaba con Heechul, voluntariamente…bien. Aunque lo dudaba, Baozi no se veía muy contento últimamente.

                Malditos putos, estaban haciéndolo de nuevo. Entró a la recamara de Siwon sin tocar y lo encontró poniéndose la camisa frente al espejo, acomodándose despreocupadamente el cuello.

                -Hey-le recriminó al verlo- ¿Qué haces?

                -Aléjate de Luhan, ¿me entendiste? Me llego a enterar que le estás haciendo algo y

                Siwon se le había acercado y tomándolo por el cuello lo había apresado contra la pared.

                -A mi no me hables así- lo soltó al darse cuenta de lo que hacía- no me estoy metiendo con Luhan. Y si lo hiciese problema mío.

                -Se perfectamente que tu también eres, o al menos como eras, igual que Heechul. Recuerda que yo los vi, sólo que tú no caíste esa noche.

                -Oye, ¿no te bastó con humillar a Heechul delante de los jefes con tus mentiras? Que ahora vueles a por mi…

                -Yo no me inventé nada, yo los vi. E intentaron hacer lo mismo conmigo pero los cagué. Te lo repito, no te metas con Luhan.

                -¿Por qué? Puedo hacer lo que se me plazca.

                -Porque Luhan es mío. Aléjate de él, se simplemente su asesor, o Kyuhyun se enterará.

                Luhan se escondió detrás de la esquina al sentir que Sehun abría la puerta y salía pitando de la habitación. Se tocó el pecho, el corazón le latía fuerte.

                “Porque es mio”…”mio”…”es mio”. Lo vio alejarse asomándose apenitas.

                Cuando se calmó llamó a la habitación de Siwon a entregarle las fotos que le había pedido. Procuró no entrar. Y luego corrió a la piscina.

               

                -¿Seguro? Em, no hace falta, no tengo tantas cosas que llevar… -Chanyeol intentaba hacerlo desistir de la idea de que lo ayudase a mudarse.

                -Sh, claro que te ayudare. Además sea por lo que sea-se encoje de hombros apoyándose contra la puerta del coche- es tiempo que paso contigo, para mi está bien-sonrió mirando por la ventanilla antes de voltear a su novio. Se veía muy sexy conduciendo- a no ser que tengas la casa hecha un asco y por eso no quieres que la vea.

                -¿Eh?-rió muy fuerte- ¿Yo la casa hecha un asco? Pero que dices…

                -Ah, ¿no?-levantó las cejas.

                -No, Eunji me la limpia y ordena siempre.

                -Lo sabia eres un quedado –rió suave y siguió mirándolo disimuladamente hasta llegar.

                Si supiera él por qué no quería tenerlo solo en su casa. Le había pedido a su hermana que le limpiase la casa esa mañana. Pero…

                -Huele rico…como a flores-dijo Baekhyun al entrar, burlándose en parte.

                -Eunji…-abrió una ventana. Ese era el perfume que ella ponía en SU casa, era de mujer. Que asco. Quedaba como un maricón- vale…a ver…-buscó un bolso y volvió al salón mientras Baekhyun lo esperaba jugando con su perro.

                -¿Cómo se llama? –le preguntó sonriendo.

                -Quién.

                -El perro.

                -Quien-revoleó los ojos hacia arriba.

                -Que como se llama EL PERRO-lo miró serio.

                -Se llama QUIEN. El perro se llama QUIEN.

                -Pos, casual.

                Los dos comenzaron a reir.

                -Oye, ire a buscar algo de ropa…

                Baekhyun se paró con la intención de seguirlo. Ay  no, a su cuarto no, que a su cuarto no entrara. ¿Por qué tenía la ropa en el cuarto? Joder.

                -Ahh, Baaekhyun amor-se paró delante de él antes de entrar a la habitación- ¿Por qué no me ayudas con otra sala? Busca mi cámara, si y la lentilla número siete, las necesito para mañana temprano.

                -Mm, vale –hizo una mueca, no le agradaba mucho la idea pero…- esta bien, voy voy-lo guió hasta su cuarto de revelado.

                -Yasito termino eh-salió casi corriendo a su habitación metiendo un poco de ropa toda asi nomas. Lo que tenía que hacer para no…Se paró en seco en el medio de su habitación. Fotos.

                Lo había dejado en el cuarto de fotos. Solo. Fotos. De él. Cerró el bolso como estaba y se dirigió hacía su cuarto de revelado rogando porque no hubiese visto el pequeño colage que tenía de él.

                Cuando entró respiró aliviado al verlo sentado cruzado de piernas con un álbum de fotos en las manos. Eran de la campaña que estaban haciendo, allí tenía fotos de todos por igual.

                -¿Qué tal te parece que quedaron?

                -Muy buenas, me gusta en especial ésta-respondió con una sonrisa girando el álbum. Era una de él haciendo un corazón con los dedos.

                -¿De…de dónde salió esa foto? - ¿Qué hacía en ese álbum esa foto?

                -Estaba con las demás en la lamina esa…-respondió haciéndose el tonto señalando hacia atrás intentando no sonrojarse demasiado.

                La última que había agregado era la que le había tomado en su primera cita.

                -Ah…eso –se puso rojo hasta las orejas- estaba…-movió la naricita y se frotó la cabeza- estaba pensando hacerte un regalo, con las fotos que más me gustan de ti y…

                Baekhyun lo había abrazado por la espalda y apoyaba su mejilla en el.

                -Oso grandote, no me mientas-dijo sonriendo-yo también saque furtivamente un par de fotos tuyas –rie.

                -Oh…mm –demasiado avergonzado. Se volteó a verlo- a si?

                -Si, mira- cogió su móvil y se lo mostró. Una era de un pie, que supuso sería su zapatilla. Otra de un montón de personas de espaldas, donde también supuso que estaría el. Y la última estaba toda movida, pero se lo distinguía levemente a él sonriendo.

                No pudo evitar reir pero se enterneció mucho.

                -Ai, no puedo contigo bebe – lo tomó por la cintura y le dio un besito. Cogió una cámara y apunto hacia ellos dos- ahora tendremos una bien bonita.

                Sacó unas cuantas, una los dos sonriendo, en otra Baekhyun le daba un beso en la mejilla, en la siguiente se miraban, y en otra Chanyeol lo besaba. La cámara quedó relegada a un segundo plano en cuanto los labios del mayor se chocaron con los suyos y sus manos se perdieron en su cuerpo. Le quitó lentamente el abrigo que llevaba dejándolo en el escritorio y pasó su mano por su cintura atrayéndolo más hacia el. Baekhyun mordió suave su mentón y con las manos en su cabello comenzó a besarle el cuello al tiempo que Chanyeol deslizaba una mano por debajo de su camiseta…su piel era tan suave.

                Lo levantó haciendo que lo abrazara con las piernas y sin dejar de besarlo lo llevó hasta su cuarto. Tenía las dos manos sobre sus pompas, y no podía evitar que lo morboso saliese de si.

                -Tu…culo, me encanta-le dijo pícaramente jalando su labio inferior antes de tumbarlo en la cama con cuidado y quedar sobre el. Levantó su camiseta lentamente sintiendo como el menor repiraba mas fuerte cerca de su oreja, mordiéndola...

                No podía controlarse más. Levantó más su camiseta y besó su pecho, bajando por su abdomen mientras acariciaba su cadera con una mano.

                -Yeol…-estaba nervioso y avergonzado, pero a la vez…

                -¿Qué sucede bebe…-paró con ambas manos a los lados de el y lo miró.

                -N…nada-negó con las manitos y tomó su cara para besarlo fuertemente mientras le desprendía un botón de su camisa. Chanyeol le quitó la camiseta y se lo quedó mirando, así debajo de él…entregado a su hacer. Se mordió el labio.

                -Nu…no me mires-se tapó la carita con las manos.

                -¿Por qué no?-le corrió las manos con ternura- si tu me encantas.

                -Soy feo –hizo un puchero- mi cuerpo…no es bonito.

                -¿Qué tu cuerpo no es bonito?-frunce el seño y luego sonríe tierno dándole un besito Te hare ver que tu eres la cosa más preciosa del mundo.

                El rubio se sonrojó muchísimo. Su gigante era perfecto. Lo besó de nuevo desprendiendo otro botón…si seguían, ya sabía donde terminarían…

                -Baekhyun, quiero hacer el amor contigo.

                -Pe…-el corazón le iba a mil. Se lo había imaginado muchas veces, pero que estuviese sucediendo era…-pe..pero tu no me amas.

                Comentario idiota.

                Chanyeol levantó las cejas y sonrió de lado.

                -¿Y quien dijo que yo no te amo?-susurró sobre sus labios antes de darle otro besito.

                Ahora si no podía creerlo. Quería llorar.

                -Chanyeol…tu…

                -Yo te amo Baekhyun.

                Acarició su mejilla mirándolo y sonrió.

                -¿Puedo amarte yo también?-sonrió y lo beso tiernamente.

                -Claro que puedes-rio bajito ante su respuesta y siguió con el beso. Le ayudó a que terminara de quitase la camisa sin despegarse de sus labios y bajó la mano hacia su entrepierna.

                -Yeol…yo…-volvió a ponerse nervioso- yo nunca…

                -¿De…verdad?-se lo había imaginado si, pero como algo imposible. Pensó que solo fingía inocencia. Joder cada día le gustaba más. El contrario asintió- podemos esperar si quieres.

                Negó.

                -Esta bien, cuidare de ti-le da otro beso enternecido y comienza a tocarlo sobre su jean. La vergüenza a Baekhyun se le fue pasando de a poco, besó el cuello del contrario, su pecho, acarició fuerte su espalda…un botón desprendido…otro mas…

                Un teléfono sonando.

                -Que…-era una música horrible. Baekhyun ya tenía el pantalón desprendido por el mas alto que indignado separó las manos y sus labios de su novio mirando con odio a su móvil.- Joder es Kibum.

                Parecía la música de una película de terror. Lo dejó pasar. Pero volvió a sonar.

                -Joder –se levantó y cogió el móvil intentando no sonar agitado. Baekhyun ocultó una risita al verlo y lo esperó mirándolo- Oh…bueno…si en un par de horas voy. ¿Eh? Pero-comenzó a caminar por la habitación- ¿no puede? Vale…VALE. No, no te estoy gritando. Enseguida voy.

                Cortó y lo miró. Por qué justo ahora. Ambos suspiraron. Chanyeol volvió sobre él y le dio otro beso.

                -Continuaremos, en otro momento…luego que mate al jefe, por ejemplo-sonrió. Lo ayudó a cambiarse.

                Lo dejó a un par de calles del edificio, iría a hacer unas compras y le había dicho a Jongin que lo esperara para poder volver con él.

                Necesitaba hablar con su amigo, urgentemente. Omitió la parte en la que le dijo “te amo”, no quería escuchar su “No les creas cuando dicen te amo antes de hacerlo. Son un te amo de calentura, ¿me explico?” Y así. Siempre tan directo en ese tema. Pero si le contó lo otro,  necesitaba…consejos.

                -Relájate. Simple, es como un instinto, te dejas llevar. Solo procura que se cuide, ¿vale?

                -Mmh, vale…

                -Y en cuanto a lo que le gusta, pues lo irás descubriendo. Piensa en que te gustaría que te hagan a ti, el es hombre, su cuerpo reaccionará parecido-le dijo comiendo su helado de chocolate con grajeas blanquitas.

                El día se pasó volando. No dejaron de hablar de su novio y su “compañero”, que era asi como Jongin definía a Kyungsoo. Un poco…sin tacto.

                Chanyeol se tumbó en su cama mirando al techo. No podía dormir. Dio vueltas y vueltas, lo habían tenido toda la tarde preparando cosas, tenía que pensar en ideas nuevas para presentarle a la compañía Spring. Su Baekhyun…

                Joder. Le iba a habla por móvil, vio su “en línea”. O sea estaba despierto, y ya eran las dos. Y si…

                Que ganas de verlo, de tenerlo a su lado…si, comerlo a besos. De que dijera su nombre…

                -Baekkie…

                Si, así de claro quería escucharlo.

                -Baek- alguien le picó el brazo suavecito y se descubrió las mantas- shhh-le hizo una seña para que no hablara y se coló entre sus sábanas- hola-le sonrió Chanyeol en la oscuridad.

                -H…hola-no se lo esperaba. Si se lo había imaginado, él colándose en su cama, él corriendo hacia su habitación. Toda la tarde pensando en eso y …- ¿Qué haces aquí?-susurró divertido.

                -Quería verte.

                -¿Y si nos descubren?

                -No me importa-rie bajito- igual no lo harán-corre un mechon de cabello de su frente y el pequeño se sonrojó, lo tenía tan cerca…

                -Está oscuro, casi no puedes verme…

                -Vale, tal vez había otra cosa que también quería hacer- Chanyeol pasó una mano por su cintura y llevándolo hacia si le dio un beso tierno en los labios. Baekhyun pasó los brazos alrededor de su cuello acariciándolo.

                Era tan rico…la mano de Chanyeol dibujaba pequeños trazos en su cadera y su cintura. Lo había pegado tanto que lo sentía completo.

                -Eso…me parece más… ¿mejor?-rie suave mordiéndole su labio inferior.

                -¿Y esto?-busca su cuello y le hace brrr en el. Baekhyun intentó no reir para no despertar a Kyungsoo. Le hizo cosquillas para vengarse, pero Chanyeol lo aplastó y tomó por las muñecas poniéndolas a los lados.

                -Shh-riendo bajito. Un leve “clac” los hizo quedarse inmóviles. Se había abierto la puerta. Un hilito de luz se filtró por la habitación y luego volvió a cerrarse. ¿Quién había entrado?

                El corazón se les había parado a ambos, ni siquiera respiraban. Pero los pasos no se acercaron a ellos, fueron directo a la cama de Kyungsoo.

                Intentaron ver por un huequito de la cortina que separaba su cama y la poca luz que entraba por la ventana. ¿Quién era?

                -Bebe…-susurró esa persona subiendo a la cama de D.o- despierta….-habia corrido la manta.

                -Mmm, Jongin….-susurró su compañero.

                ¿Jongin? ¿Qué? Ambos respiraron, pero Baekhyun comenzó a desesperarse. Probablemente hubiese llegado hasta allí medio zonambulo pero…sabía lo que vendría. No debían estar allí. Yeol le puso los dedos sobre los labios para que no hablara aun.

                -Vamos…déjame-pidió bajito Jongin mordiéndole el labio.

                -Estoy cansado….-susurró sintiendo las manos del contrario en su cadera- además Baek podría oir…

                -Anda…se que quieres- deslizó las manos hacia su entrepierna. Un leve gemido- Baek duerme pesado.

                -Joder, tus manos Kai- dijo entre una protesta, una suplica y …-mm…

                -¿Qué?-susurró Chanyeol mirando a Baekhyun incrédulo con una sonrisa en la boca- ¿lo harán aquí?

                El rubio no sabía donde meterse, pero le hacía gracia la situación.

                Kyungsoo le quitó la remera al menor y se prendió a su espalda besándolo por el cuello, pero Jongin no lo dejó.

                -Dijiste que estabas cansado- le tumbó sobre la cama de nuevo y separando un poco sus piernas comenzó a penetrarlo al tiempo que lo besaba para acallar sus gemidos.

                No, no podía ser. ¿Se estaba poniendo al oírlos? Chanyeol cerró la cortina, demasiado espectáculo de sombras. Miró a Baekhyun debajo suyo, sabía lo encendidas que estaban sus mejillas por mas que no lo viera. Rozó sus labios…oír un gemido tras otro.

                -Y…yeol-susurró deseando que lo besara. El contrario atacó su boca con ganas, mordiéndosela, jugando con su lengua…y moviéndose tantito sobre el. Chanyeol soltó una de sus muñecas  y bajó por su pecho, su abdomen, hasta dar con el elástico de su bóxer. La mano de Baekhyun lo siguió, pero ese se la volvió a su lugar.

                “-Ahhhh-las mano de Kyungsoo volvían a clavarse en la espalda del moreno al tiempo que gemía mas fuerte ya que Jongin lo estaba estimulando con las manos.”

                -Dejame-susurró entre el beso tocándolo sobre la tela y buscaba su cuello para besarlo. Ya no podía más, explotaría.

                Que callaran a Kyungsoo o se vendría así de la nada, eso mas la mano de Chanyeol sobre su cosita…

                -Hmm…-se mordió los labios- por favor…-susurró sin pensarlo. Avergonzado como jamás lo había estado. No terminó de decirlo que la mano del otro ya jugaba con su miembro dentro del bóxer.

                Era la primera vez que lo tocaban ahí…y tan rico. No podía contener los leves gemidos de placer…arriba…abajo…

                -Ye…yeol…me…-el contrario presionó con más fuerza al escuchar su nombre y arrastraba el liquido preseminal por todo su miembro. Retiró la mano y lo giró dejándolo de lado.

                Iba…¿demasiado rápido? Que…

                -Tranquilo…-le susurró al oído desde la espalda. Había bajado su bóxer por completo. Separó sus nalgas y lo comenzó a frotar suave con su erección bajo el bóxer.

                Ese seria el punto de su locura ¿por qué lo torturaba asi? Pasó la mano hacia adelante volviéndolo a masturbar y la otra la llevo a la boca del pequeño para acallar sus gemidos mientras besaba su cuello.

                Chanyeol también explotaría. Quería explorar cada parte de el…se lo imaginó encima suyo, el dentro suyo, gimiendo. Y se corrió cerca de la entrada del menor.

               

                

Another (shot) - Capitulo 6 . Sehun

              

                   La semana se pasó volando. De nuevo estaban en domingo. Los H, como los habían comenzado a apodar en la empresa luego de las fotos, Luhan y Sehun, no se habían hablado de nuevo más que para maldecirse.

                Sehun se paró frente al espejo con un peine y se miró el cuello de cerca. No recurriría a ese estúpido. Las marcas casi se habían ido, y frotarlas con el peine había ayudado a que se hiciesen menos nítidas. Mala idea.

                Se presionó con los dedos en un costado del cuello hasta sentir dolor. Una simple marca colorada. Pellizcó más, se frotó y cuando creyó tener lo suficientemente irritada la piel se puso una bufanda y salió hacia el despacho de Kibum. Que patético. Él, el gran Oh Sehun. Reducido a…un peine.

                Entró en la oficina del jefe sin ni siquiera tocar. Para que.

                -¿Así están bien?-preguntó impulsivamente quitándose la bufanda. Pero no vio a nadie. Se paró en seco escuchando.

                -Mmm..si….un poco más, ahí..aaah tus manos Jonghyun! –se asomó apenas por el marco de la puerta  que daba a la sala de descanso con una mano sobre la boca. No esperó encontrarse eso, para nada. Jonghyun fue el primero en verlo.

                No pudo contener la risa. Kibum debajo de Jonghyun, que sentado sobre su trasero flexionaba las piernas de su jefe y le hacía masajes en los pies.

                ¿Por qué siempre tenía que ver cosas que no debía?

                Al oír su risa Key se incorporó de repente haciendo que Jonghyun cayera, lo que acrecentó la risa del menor.

                -¿Quién te dio permiso de entrar?-lo miró de mala ostia Kibum parándose.

                -Ai, yo, lo siento –entre risas- es que estaba abierto y

                -¡No estaba abierto!-se le acerca como para echarlo ignorando a Jonghyun que se partía de risa en el suelo- ¡Vete de aquí!

                -¡No no espere!-intentó controlarse para hacerse oir.

                -¡Largo!- gritó poniendo una mano sobre la puerta.

                -¡Esto! –se señaló las marcas del cuello bajándose un poco la camiseta.

                -¿Qué tiene eso?- le preguntó en un tono de voz neutro e inexpresivo.

                -¿Están bien asi?

                -¿Me estás tomando el pelo verdad? Te mataré-se abalanzó sobre el chillando- ¡Interrumpes mi momento de relajación de domingo!

                Jonghyun se apresuró a tomarlo por la cintura y levantándolo lo alejó de su objetivo.

                -¡Usted me las pidió!-la situación lo hacia reir no podía contralarse, su jefe estaba loco.

                -¡Que le corten la cabeza! –chilló pataleando.

                -¡Digame si asi están bien y me voy!

                Jonghyun lo hizo salir y luego de un rato volvió a entrar cuando Kibum se hubo calmado. Lo esperaba cruzado de brazos.

                -¿Con que te las hiciste? ¿Con una sopapa frente al espejo?

                No se la dejaría pasar.

                -¿Y como quiere que me las haga? ¡No tengo quien!

                -El mismo que la otra vez.

                -No puede.

                -Pos arrégleselas, es trabajo. Fin de la discusión.

                -Vale, si por trabajo se trata –no se rendiría tan fácilmente- Jonghyun, ¿me las haces tu?

                El asistente se encogió de hombros haciendo los ojitos hacia arriba, pero cuando iba a responder Key le arrojó papeles a Sehun.

                -¡No te pases!

                -¿Y cómo quiere que haga? Igual es trabajo.

                -¡Te consigues una puta Oh Sehun! ¡Y tu no abras la boca!

                -Esta bieeeen-desiste antes de que le tire con otra cosa. Ya se las arreglaría. Pero al voltearse para irse comentó una ultima cosa- ¿Por qué Jonghyun va sin camisa?-levanta las cejas mirándolos.

                Tuvo que salir corriendo.

                Volvió a su habitación frustrado. ¿Por qué no le prestaba a su novio para que lo hiciese? Claro, era molesto. Inconscientemente se encogió de hombros. Tal vez podría pedirle a Jongin, aunque no le hacía mucha gracia ya que por mas que lo detestase, no podía sacarse a ese chino de la cabeza. Cuando llegó su compañero estaba tirado en su cama jugando con el móvil.

                -¿Qué nunca te cansas de eso?-le preguntó quitándose la remera para sentarse a responder una entrevista que le había enviado Kyuhyun.

                -Estoy jugando para Dodito, se había quedado en el nivel 375 del Candy Crush-el tampoco llevaba camiseta, hacía demasiado calor en su habitación. Sehun lo recorrió con la mirada, su pecho tonificado, sus abdominales y su pelvis bien definida con esos jeans bajos…-¿pudiste solucionarlo?- quizo saber dejando el móvil a un lado.

                -Ahh , no- se lamentó inclinándose en su silla y lo miró- tu no puedes ayudarme ¿verdad?

                Jongin se rió.

                -Quisiera hacerlo, pero no podría, no se controlarme- se encogió de hombros- lo siento, tendrás que buscar a …

                -No, ni lo nombres.

                Al rato golpearon la puerta se asomó Kyungsoo.

                -Permiso-dijo dándole una sonrisa a Jongin. Se sentó en el borde de su cama, pero el moreno lo abrazó recostándolo a su lado. Pero Kyungsoo no había cerrado la puerta, detrás suyo venía Luhan. Sehun miró a Jongin buscando una explicación.

                Luhan lo ignoró por completo, como si no estuviese. Igual que él. Los tres conversaron y rieron un buen rato.

                -Mm, tengo hambre, creo que ire a comprar algo-dijo Luhan en un momento- ¿quieren algo?-se levantó para salir.

                -Oh, espera-dijo Jongin- vamos nosotros-miró a Kyungsoo pícaramente. Cada segundo que podían escabullirse juntos, lo hacían- traeremos de todo. Esperen que no tardamos, no se maten ¿si?

                -Pe…pero-intentó retrucar Sehun al oir lo que sucedía. Se fueron y Luhan quedó sentado de brazos cruzados en un puff mirándolo.

                Sehun se había puesto los auriculares lo más fuerte posible e intentaba no despegar la vista del papel. Sentía que lo miraba, estaba seguro. ¿Y si intentaba atacarlo por detrás? No, no tenia que ser tan paranoico. Pero, solos en una habitación…bueno Jongin y Do eran testigos que habían estado allí. Cerró los ojos y dejó el boli sobre el papel, ¿por qué diablos tenía que ser asi ese maldito? No lo entendía, un dia venía lo besaba, y al otro, lo puteaba. Lo miró de reojo. Joder, encima estaba cruzado de piernas, con esa mirada felina clavada en el. Suspiró y se tocó el cuello, le dolía, necesitaba unos masajes. Ese afortunado de Kibum…

                Pero sintió algo cálido sobre su mano y como uno de sus auriculares se alejaba de su oreja . Frunció el seño, ya tenía que venir a molestarlo?

                -Déjame…-su tono de voz no era agresivo, era amable- pareces contracturado-comentó deslizando las dos manos sobre su cuello- déjame distenderte un poco- bajó con sus manos por su pecho inclinándose hacia el, acariciando su torso antes de volver a su espalda.

                No podía responder, la garganta se le había secado. Sus delgados dedos acariciándolo le ardían.

                -Luhan…-dijo bajo poniendo una mano sobre la suya-

                -Shh, no digas nada, por favor-susurró en su oído dándole un beso en la mejilla- no te hare daño.

                Sehun se relajó cuando comenzó a hacerle masajes. Pero luego de un rato sintió un calor diferente en su cuello, eran los labios de Luhan sobre el. Besándolo tiernamente.

                -Luhan…-repitió queriendo no cerrar los ojos.

                -No me alejes…por favor-susurró en su oído. Sehun se levantó y se volteó hacia el tomándolo de la muñeca.

                -¿Por qué juegas conmigo?-le pregunto mirándolo fijo a los ojos. Esos hermosos ojos color caramelo.

                Luhan se desconcertó por un segundo. Balbuceaba. Y la vista de Sehun se clavó en esos labios.

                No esperó mas respuesta y tomándolo por la cadera lo acercó a el y comenzó a besarlo. A la mierda todo. Que lo arañara si quería, pero no lo soltaría. Luhan correspondió a su beso de manera inmediata, pegándose al menor todo lo que podía, sintiendo su tibio cuerpo contra el suyo. Luhan arremetió contra su cuello en cuestión de segundos, al tiempo que Sehun enlazaba los dedos con su cabello y con la otra mano exploraba su espalda por debajo de su camiseta. Hizo pasos hacia adelante dejándolo pegado a la pared y volviéndolo a besar.

                El mayor era atrevido, ya tenía las manos en su cadera y atentaba con bajar hacia su entrepierna.

                -Espera…-le advirtió Sehun poniendo una mano sobre la suya y un brazo en la pared pegando su frente a la de el- no puedo jugar, no juego con eso, o no me detengo…

                -No quiero parar ahora. Tardarán en volver.

                Simple. ¿En verdad iban a …?

                La mano de Luhan siguió su camino hacia su entrepierna acompañada de la del más alto y comenzó a tocarlo por sobre su jean al tiempo que Sehun se deshacía de su remera besándole el cuello.

                Luhan puso las manos sobre su pecho y lo separó unos centímetros, dejando pequeños besos en todo su pecho, bajando lentamente hasta quedar arrodillado, con las mejillas encendidas desabrochando su pantalón.

                Tenía tantas ganas de hacérselo…

                -Lu…-sintió un escalofrío ante el aire, pero su voz quedó sofocada al sentir su miembro dentro de la boca de su hyung, lamiéndolo con ganas, masturbándolo al mismo tiempo y emitiendo leves gemidos. Sehun se inclinó más sobre la pared pegando su frente a su brazo acompañándolo con un leve movimiento de caderas, acariciando su mejilla…-hhmm…

                Lo miró. Su cabello y sus mejillas se asemejaban en color, y su cara de placer…Agg…tomó su cuello haciéndolo llegar hasta el fondo y se corrió dentro suyo. Que lo tragase todo. Tal vez en parte, cobrándose un poco lo que le había hecho. Sus mejillas se mancharon, y Luhan lo miró con la boca entreabierta tocándose su propia entrepierna, estaba demasiado excitado.

                Sehun lo levantó y lo tumbó sobre su cama besándolo fuertemente, metiendo la mano debajo de su pantalón para masturbarlo. Luhan se puso algo nervioso cuando también le quito el jean. Y los bóxers desaparecieron de escena.

                Cuando lo tuvo delante sin ropa se lo quedó mirando, era diez veces más hermoso de lo que se había imaginado. Luhan pasó los brazos por encima de sus hombros y acarició la base de su nuca besándolo, sintiéndolo sobre el, como su calor se hacía suyo y sus miembros se rozaban. Despacio Sehun acarició cada centímetro de su cuerpo con la yema de los dedos, moviéndose sobre él de a poco…

                -Hazme tuyo…-le susurró Luhan rozando sus labios antes de besarlo. Sehun no podía creer lo que oía. Le hizo que le chupara los dedos y bajo hasta su cavidad, introduciéndolos de a uno, haciendo movimientos circulares para que se acostumbrara. Dudo que fuese virgen…pero estaba tan estrecho. Gimió debajo de el, pero se mordió los labios y apoyó la frente en su hombro. Otro más- aahh.

                -Gime todo lo que quieras, nadie te oirá- le dijo girándolo despacio. Besó toda su espalda contando los siete lunares que tenía. Separó un poco sus piernas haciendo que levantase la cadera y le dio una pequeña mordida a su nalga- eres todo bonito-comentó sonriendo de lado antes de lamer su entrada simulando penetraciones para lubricarlo mejor.  

                -Se..hun…-se mordió el labio. No aguantaba más. Y cuando el menor comenzó a jugar con su miembro, sentía que iba a explotar- Oh….Sehun...

                En un segundo Sehun tenía las manos en su cadera y se abría paso con su miembro entre sus nalgas. Despacio comenzó a penetrarlo, sintiendo presión en su miembro ante su estrechez. Luhan se aferró de las sábanas quebrando la cadera. Soltó un gemido fuerte al tenerlo todo dentro suyo y comenzó a moverse con el.

                -Aahh…-estiró su brazo pegado a la cama, apoyando el codo del otro brazo para mantenerse, pero las estocadas iban cada vez más fuertes, más rapidas…sintió un escalofrio por la espalda y luego mucho placer en su pelvis. Sehun lo estaba haciendo con cuidado, besándole la espalda, y reclinándose sobre el besó su cuello, y mordió el lóbulo de su oreja.

                -Relájate…-susurró embistiendo con más ganas, dejándole un gemido al oído. Una gota de sudor le resbalo desde la sien y al rato Luhan lo hizo detenerse para dejarlo acostado y sentarse sobre el mirándolo.

                -Mi…turno-dijo con su voz felina, distorsionada un poco por el pudor que estaba sintiendo y tomando una de sus manos se sentó sobre su miembro penetrándose, haciendo movimientos lentos, saliendo y entrando varias veces, viendo como el menor se retorcía de placer debajo de el y crecía dentro suyo.

                -M..as…asi ..hhm.-el mayor tomó una de sus manos mordiendo y chupando sus dedos, al tiempo que dejaba escapar gemidos, logrando que Sehun se corriera dentro de el. El menor lo miró, el pelirrojo aun estaba exitado y a duras penas contralaba la respiración. Lo abrazó saliendo de el con cuidado.  Se recostó sobre el besándolo mientras deslizaba la mano por su vientre, acariciando alrededor de su miembro procurando no tocarlo.

                -No seas asi –susurró clavando los dedos a su espalda al tiempo que flexionaba una rodilla. El menor siguió con su juego hasta dar con su miembro y tocarlo lentamente, despacio, comenzando por la punta…

                -Tengo ganas de probar si sabes rico-le dijo pegado a sus labios y a su pecho. No le dio tiempo a responder, porque estaba bajando por su abdomen mordiéndolo. Luhan volvió a aferrarse de las sabanas gimiendo de placer mientras Sehun le hacia sexo oral. El mas rico que le habían hecho nunca. Enloquecería en los brazos de ese hombre.

               

                A la mañana siguiente Sehun tenía una sonrisa de oreja a oreja como un bobo. ¿Por qué se sentía bien? Cuando fue a lavarse los dientes se vio al espejo. Tenía todo el cuerpo con marcas violáceas. No lo había soñado.

                El dia anterior Jongin y Kyungsoo había vuelto recién a las tres horas con comida. Suerte que no llegaron minutos antes porque los habrían encontrado aun sin ropa. Hicieron como si nada, Luhan sentado en la misma silla, y Sehun en la de él. Con la diferencia de estar completamente marcados por el otro debajo de la ropa. Se olió, aun tenía su perfume en la piel. Entró a la ducha y se quedó un rato largo debajo del agua.

                Lo habían hecho, si. Y Luhan parecía tener otro carácter. Pero cuando salió de la habitación, sus expresiones volvieron a ser …de pocos amigos.

                Cuando llegó a la sesión de ese día, Kibum le hizo igual un escándalo.

                -¡Salvaje! ¡Mira como te han dejado! Te dije unas marcas sobre el cuello, no que te comieran vivo hombre.

                Se encogió de hombros y dejó que le maquillaran el exceso de chupones. Lo raro fue que Luhan apareciese con la piel impecable. Las fotos no fueron como la otra vez. Esta vez era algo parecido a un harem.

                Iu en el centro, con Jongin recostado delante con la cabeza entre sus brazos. Kyungsoo sentado en su vientre reclinado hacia atrás sobre las rodillas del moreno. Sehun y Baekhyun con las espaldas pegadas, mientras que Xiumin y Luhan se mantenían también en el centro enlazados con cintas rojas. Luego de esas, tuvieron fotos de a dos o por separado toda la semana.

                Intentó hablarle a Luhan, pero lo esquivó. Invitarlo a salir era muy complicado. Lo había estado pensando, no quería que se hiciese la idea de que solo lo quería para…bueno, el lo había buscado, no tenía la culpa, pero…podía invitarlo a salir a beber algo de vez en cuando.

                Hablarle era un martirio. Lo miraba mal, le respondía cortante. Y no entendía que le pasaba.

                -Jongin. ¿Crees que Luhan no quiera saber más nada conmigo y por eso me esquiva? Que me haya…ya sabes…

                -¿Usado? –levanta las cejas acomodando la ropa de su armario- no lo creo, Kyungsoo me pidió una vez tu numero, Luhan se lo había pedido.

                -¿De verdad? –frunce el seño pensando- nunca me llegó nada de el.

                -Le preguntaré a Dodito por si sabe algo- dijo antes de irse.

                -“Dodito”-lo imita burlonamente con una sonrisa- te tiene embobado Kai.

                Chanyeol y Baekhyun se encontraron en la plaza del centro a las siete. Irían a la veterinaria de la hermana de Yeol.

                -Ains…emmm yy que le debo decir?- le preguntó Baekhyun estirando todas las palabras nervioso.

                -¿Qué le debes decir?-sorprendido tomando su mano para caminar- ¿Qué eres mi novio? Eso ya lo sabe.

                Así que le había hablado de él. La sangre se le subió a las orejas. Le había hablado de el a su hermana. DEL EL A SU HERMANA. Iba enserio entonces.

                Los padres de Chanyeol eran traductores, así que no vivían en la ciudad, se la pasaban viajando. Era muy cercano a su hermana ya que era su único pariente allí, y hasta hacía tres años habían vivido juntos.

                -No te asustes si es un poco…bruta, ¿vale? Es muy tierna en el fondo-le avisó antes de entrar a la veterinaria.

                Era…un remolino. Esa energía tenía su hermana, Eunji.

                -Ahh, pero si es bonito hermano, mira que bien has ligado –dijo terminando de cercarle el cabello a un perro.

                -No seas tan vulgar –le respondió Chanyeol riendo- Baekkie-poniendo una mano en su espalda- Eunji, mi novio; Eunji, Baekki, mi hermana-y se quedó mirando al aire pensando-

                Los otros dos comenzaron a reírse.

                -Que lo has dicho al revés, tarado –Eunji le dio un codazo al pasar a su lado para guardar al perro dentro de una jaula- ya vendrá a por ti bebe, a que si, falta poquito, ajoo…

                -Lo ves-le dijo Chanyeol a Baekhyun bajito – es tierna.

                Recibió el golpe de una pelota de hule en la cabeza.

                -Te oí cabrón. Anda, ven –toma a Baekhyun por el brazo sonriéndole- cuéntame ¿ya lo han hecho? Sabes que tienes que cuidarte, ¿verdad?

                Baekhyun se puso todo rojo y Chanyeol se tapó la cara con una mano.

                -Eeh…

                -Estoy bromeando –rió pellizcando su mejilla- tengo ramen instantáneo, pasen.

                Se quedaron conversando hasta entrada la noche, era muy simpática. Y se reía igual que él. Chanyeol no dejaba de mirarlo todo el rato. Como se movía, como se quitaba el flequillo de encima de los ojos, como sonreía.

                -Oh, ¿que tantos son esos cositos?-le preguntó Baekhyun haciendo referencia a una cantidad excesiva de sprays.

                -Spray pimitienta. Para humanos y para perros. Se vende mucho últimamente, los robos y asaltos a mujeres han aumentado en masa.

                Chanyeol cogió uno.

                -Ten-se lo pasó a Baekhyun- espero nunca lo uses, pero mejor si lo llevas contigo.

                -Sobreprotector y tu –Eunji rió y se despidió de los dos- ¡directo al edificio lo llevas eh! ¡Nada de apretones en el parque!

                Parecía una vieja. Pero les dio una bonita idea.

                Chanyeol se sentó al borde de una estatua rodeada de árboles en la plaza del centro y tomando a Baekhyun por la cadera lo paró entre sus piernas para besarlo.

                -Vivo de besos y abrazos, tantas cosas dulces me harán mal(?-sonrió jalando su labio despacio.

                -Y de cosquillas.

                -¿Cosquillas?-levantó las cejas.

                Baekhyun asintió sonriendo y comenzó a hacerle cosquillas.

                Joder, ¿por qué era tan tierno?

                El ambiente lo inspiró a sentirse dentro de una obra de teatro barroca y comenzó a actuar. Dejó a Baekhyun sentado donde estaba el antes.

                -Oh mi amado, aquí estoy yo, este pobre señor orejas –con una mano en el pecho mientras Baek se tapaba la boquita para no reir- vengo a ti, con este sincero sentimiento, a confesarme- tomó su mano y se inclinó un poco haciendo una reverencia y le da un besito en ésta- ¿me concedería esta pieza?-mirándolo.

                -Hay que atrevido, invitarme a bailar asi –rie bajito- me encantaría. Aunque…no hay música-se bajó acercándose a el.

                -¿A, no? –se pone a cantar – y estas aquí, y a mí me gusta tu actitud, cuando me miras me das luz, y cuando mueves tu cintura, siento que me gustas tú…-sonrió al ver los ojos de Baekhyun vidriosos- y asi, de a poquito a poquitico, me llenas tu –lo beso tiernamente mientras el pequeño acariciaba sus mejillas.

                Clic, clic, clic. ¿Por qué no funcionaba? Que ese momento se detuviese, como en una foto.

                Así pasó otro mes. La campaña XHolic iba perfecta. O casi, hasta la etapa final. Xiumin estaba atareadísimo con la publicidad de pieles. De todas maneras, Baekhyun lo notaba un poco más serio. Ya no corría a abrazarlo y pegar su mejilla con la de él, ni bromeaba o lloraba de la risa. Estaba más delgado, más atractivo sin dudarlo, pero , raro.

               

                Chanyeol se lo estuvo pensando, se mudaría a los dormitorios.